Maite Goñi Indurain, Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
En sus novelas, Almudena Grandes se caracterizó por reivindicar la participación femenina tanto de manera activa en los conflictos bélicos como en el trabajo de cuidados en la retaguardia.
Dibujo Pilar Marcos García. 12 años. Teatro de la colonia del Balneario de Bellús, Valencia.
Cortesía de Ramón Soley Ceto.
La Guerra Civil Española se transformó, a nivel mundial, en la primera guerra moderna dibujada por niños. Y, en algunos casos, los niños se transformaron en reporteros de guerra.
Exhumación de la fosa de Guadalajara.
Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH)
Según datos oficiales, en España están registradas 4.265 fosas y se ha contabilizado un total de 57 911 víctimas de la Guerra Civil y la dictadura de Franco enterradas en ellas. Sin embargo, solo un 8,4 % de las fosas han sido exhumadas.
Un estudio con universitarios navarros en el que participaron víctimas de ETA demuestra la importancia de mantener viva la memoria para deslegitimar la violencia y prevenir la radicalización.
Individuo asesinado en Villaverde del Ducado (Guadalajara). Fue maniatado y enterrado boca abajo, típica forma de humillación postmortem.
Alfredo González Ruibal
Las exhumaciones de las fosas de la Guerra Civil no solo permiten la recuperación y el entierro digno de los asesinados, sino también conocer de forma científica el pasado.
En 1933, diecisiete nuevos colegios fueron inaugurados en Madrid. En la imagen, el Grupo Escolar Pablo Iglesias, en la calle Barceló, rebautizado tras la guerra civil como Colegio Isabel La Católica.
BNE -Biblioteca Digital Hispánica
Jaume Claret, UOC - Universitat Oberta de Catalunya
En momentos críticos como este, se impone la necesidad de creer en la capacidad transformadora del conocimiento, recuperando el del pasado, creyendo en el del presente e invirtiendo en el del futuro.
Imagen de Through the Darkest of Times (Paintbucket Games, 2020).
Paintbucket Games
Por su papel predominante en la cultura popular, los videojuegos ambientados en determinados momentos históricos pueden tener un papel vital en la consolidación de la memoria.
Una vez desalojados los restos del dictador Francisco Franco, comienza el proceso de resignificación del Valle de los Caídos. La autora propone la exhumación de las víctimas que yacen en la fosa común o la dignificación de sus tumbas, el desalojo de la comunidad benedictina y el derribo de la inmensa cruz que preside el valle de Cuelgamuros.
Un helicóptero transporta los restos del dictador Francisco Franco hacia el cementerio de Mingorrubio, madrid.
Reuters TV
El dictador Francisco Franco ya no tiene cabida en el Valle de los Caídos.
Cementerio judío de Quatzenheim, cerca de Estrasburgo, con tumbas vandalizadas con símbolos nazis. (Quatzenheim, Francia, 20 de febrero de 2019).
Hadrian / Shutterstock
Muchos libros ‘re-editados’ durante los 40 años de dictadura siguen en circulación tras años de democracia, sin haberse corregido los cambios impuestos por el franquismo.
Niños mirando un cartel con la imagen del dictador Francisco Franco.
Biblioteca Digital Hispánica - BNE
La escuela parece haberse olvidado de la memoria histórica en sus libros de texto, que a veces abordan de forma sesgada y tergiversada lo que ocurrió durante y después de la Guerra Civil española.
Constitución de 1978 firmada por el Rey Juan Carlos I. Figuran también las rúbricas de los presidentes de las Cortes, del Congreso de los Diputados y del Senado, así como el resto de miembros de las Mesas. Junto a la Constitución, la pluma que utilizó el Rey para firmarla, y que forma parte de los fondos del Archivo del Congreso de los Diputados.
Archivo Congreso de los Diputados de España
La de 1978 es la segunda constitución más longeva de la historia de España, sólo superada por la de 1876. No sólo merece un reconocimiento por haber propiciado un tiempo de solidez institucional en paz. Su contenido es valioso y digno de defensa.
Desfile franquista en Salamanca, 1937.
Wikimedia Commons / Biblioteca virtual de Defensa
Conocer los recuerdos de los perdedores en la guerra civil y posguerra española ofrece la oportunidad de conciliar a la sociedad con las diferentes partes de nuestro pasado histórico.
Las ruinas de una iglesia en Belchite, Zaragoza, destruida durante la Guerra Civil Española.
Shutterstock / Gonzalo Vidania
Historiador. Profesor agregado en los Estudios de Artes y Humanidades y director del Máster Universitario de Historia del Mundo Contemporáneo, UOC - Universitat Oberta de Catalunya