La sostenibilidad cobra cada vez más importancia en la estrategia empresarial. Pero, además, empleados y clientes reclaman cada vez más responsabilidad por parte de las empresas.
La economía circular multiplica el valor y la vida de los productos, reduce la generación de residuos y es eficiente en el uso de los recursos. El objetivo, ser sostenibles.
La raplicación de los ODS ha de ser una responsabilidad compartida. Así, tanto el Gobierno municipal como las empresas madrileñas, busca incorporarlos a sus estrategias de trabajo.
Nuestro estado emocional puede influir en cómo decidimos gastar nuestro dinero. Un estudio ha comprobado que, a medida que baja el ánimo, aumentan las inversiones en activos sostenibles.
Playas de la Barceloneta y de Sant Sebastià en Barcelona.
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No hacer una transición adecuada hacia la neutralidad climática implica riesgos regulatorios, reputacionales y de supervivencia para las empresas, y mayores riesgos climáticos (el aumento de la temperatura del planeta y del nivel del mar, entre otros).
Además de ser muy beneficioso para salud, este pescado azul es uno de los alimentos con menor huella de carbono cuando se captura mediante cerco o ‘xeito’, una técnica gallega.
La limitación del número de visitantes y una mejora en la calidad del viaje (con visitas guiadas, rutas turísticas y turismo experiencial y virtualizado), base de un turismo urbano más sostenible.
La Comunidad de Montes Veciñais en Man Común de Paraños (Pontevedra) se fundó en enero de 1979.
Comunidade de Montes de Paraños
En los terrenos gestionados por comunidades se llevan a cabo actividades con componentes económicos, sociales y ambientales, como el cultivo ecológico de setas y la producción de carne de razas autóctonas.
Algunas acciones, como utilizar ropa de segunda mano o cambiar de dieta para reducir la huella ambiental, pueden generar rechazo o provocar incluso actitudes de desafío en ciertos individuos.
La innovación social es una herramienta para que las empresas replanteen sus modelos de negocio y vayan más allá de la generación de beneficios, innovando para mejorar la sociedad.
La lentitud de los procesos burocráticos y una normativa no adaptada a las nuevas tecnologías son algunos de los factores que más frenan el desarrollo de las empresas de bioeconomía circular.
Muchas ciudades tratan el agua como un residuo, pero los retos que conlleva el cambio climático y los objetivos de desarrollo sostenible obligan a reevaluar esa manera de pensar y actuar.
La planificación sostenible debe buscar la creación de espacios idóneos en los centros educativos. En ellos entendemos y experimentamos mejor la sostenibilidad, y es más fácil la innovación educativa.
Interior del centro de datos de Google en Council Bluffs, Iowa.
Google
Solo las 63.000 búsquedas de Google cada segundo generan 500 kilogramos de CO₂. La huella de carbono del consumo tecnológico debería dejar de ser invisible.
Para que un modelo económico basado en empresas responsables tenga éxito, las empresas sostenibles deben conseguir una relación rentabilidad/riesgo atractiva para los inversores y eficiente en la asignación de los recursos.
Hay que crear normas (y supervisar su cumplimiento) para que los bonos verdes no sean solo un anzuelo para inversiones. No puede haber empresas con proyectos puntuales que les permitan emitir estos bonos, pero que también realicen actividades ‘no verdes’ financiadas por otros medios.
Profesor e investigador en el Centro de Estudios e Investigación para la Gestión de Riesgos Agrarios y Ambientales, Universidad Politécnica de Madrid (UPM)
Dpto. Estructura Económica y Economía del Desarrollo. Coordinadora del Grupo de Estudio de las Transformaciones de la Economía Mundial (GETEM), Universidad Autónoma de Madrid